Un poco de historia
La cultura es la respuesta del hombre al medio ambiente en que éste se desarrolla, los ritos milenarios andinos de retribución para asegurar la continuidad de la protección y generosidad de las deidades, han evolucionado en sus "formas" mas no el "fondo".
El retablo ayacuchano, originalmente fue un objeto de uso mágico/religioso, de formato occidental, pero andino de fondo, un perfecto ejemplo de sincretismo.
En los años treinta "el retablo" denominado as así por intelectuales y
artistas de lima y por sugerencia de
estos, se convierte en un medio para el artista tradicional, en el cual plasma sus
costumbres, tradiciones, eventos o sucesos que marcan la memoria de los pueblos.
Una tradición familiar
Ayacucho, provincia de Huamanga, distrito del Carmen Alto (Grandes Arrieros)- Hijo del Gran Maestro Jesús Urbano Rojas, desde niño aprendí el arte del Retablo ayudando a mi padre, con los años de experiencia desarrolle mi propio estilo.
En los años ochenta tuvimos que migrar a la capital por motivo del terrorismo, estableciéndonos en el Callao donde esta el taller y ahí enseñe a mis hijos este arte que aprendí de mi padre. Por lo que el arte del retablo se transmite de generación en generación, que también se enseña a los jóvenes de la localidad.
Los motivos de inspiración son, las experiencias vividas, lo religioso y lo costumbrista, de esta manera se plasma en el retablo con mi propio estilo. Las figuras se recrean en miniatura como podrán apreciar.
En mis viajes donde represento al Perú con mi arte tradicional, en los cuales fueron reconocidos y premiados.